D.E.P. Gonzalo Marín, padre de Carolina

Esta mañana el bádminton español se ha despertado con una mala noticia. Gonzalo Marín, padre de nuestra campeona olímpica, ha fallecido en la madrugada del sábado al domingo tras varios meses luchando por el accidente laboral sufrido a principios de año.

Natural de Santa Bárbara de Casa (Huelva), Gonzalo se convirtió en una figura entrañable por el apoyo que tanto él como Toñi, madre de Carolina, mostraron a la onubense desde el inicio de su carrera. Y es que, era un habitual verlo animando a su hija en las gradas de todos los pabellones de España, tanto en las competiciones individuales como en la Liga Nacional de Clubes, en el ya desaparecido pabellón cubierto de la Ciudad Deportiva de Huelva.

Con el traslado de Carolina Marín al Centro de Alto Rendimiento Deportivo Joaquín Blume de Madrid y su posterior inicio de la competición internacional, se convirtió, como no podía ser de otra forma, en uno de los aficionados más fieles de su hija, a la que acompañaba a todas las competiciones que su vida familiar y laboral. De esta forma, ha estado presente en los mayores logros de la campeona española, que consiguió brindarle una medalla de oro olímpica, tras títulos mundiales y cuatro continentales, incluyendo el logrado en Huelva en 2018, entre otras muchas hazañas.

El pasado mes de febrero, en el Barcelona Spain Masters, la andaluza dio una lección de profesionalidad al disputar una competición en la que era el principal reclamo, a pesar de la gravedad del estado de su padre. Luchó y celebró cada punto pensando en su progenitor y, a pesar de quedarse a un pequeño paso de poder dedicarle el título, se ganó el reconocimiento de toda la familia del bádminton por haber disputado el torneo a pesar de las circunstancias.

Se ha marchado una persona cercana, que siempre ha sabido mantenerse en un discreto segundo plano, dejando todo el protagonismo a su hija. Y lo ha hecho de la misma forma con la que Carolina Marín se desenvuelve en el deporte, luchando hasta el final para intentar superar las graves secuales del fatídico accidente. No ha podido ser, pero a buen seguro que desde donde se encuentre, seguirá acompañando, admirando y animando los éxitos venideros de nuestra campeona.

Desde la Federación Andaluza de Bádminton queremos trasladar nuestro más sentido pésame tanto a Carolina Marín como a toda su familia, mandándoles un fuerte abrazo en estos duros momentos que les ha tocado vivir.

D.E.P. Gonzalo.